Reseña de Sherlock Holmes y los zombis de Camford

Sinopsis

Es octubre de 1903.
Sherlock Holmes está a punto de retirarse a una casita cerca de Fulworth, en los Sussex Downs, Watson ha contraído matrimonio por enésima vez, y el detective de Baker Street cuenta ahora con la ayuda de un antiguo ex presidiario, Otis Mercer, para realizar las labores cotidianas del oficio.Cuando Bernard Baker, masón y también detective privado, solicita la ayuda del Maestro para localizar al comprador de un extraño elixir rejuvenecedor, Sherlock Holmes decide viajar a la ciudad universitaria de Camford, donde se topará con una abominable, mefítica y aterradora amenaza, así como con una serie de enigmas que desafiarán a la mente deductiva del Gran Detective: ¿Qué secreto oculta la piedra mágica del joven millonario recién llegado de Sudamérica? ¿Quién es el hombre de la mano de metal? ¿Cuáles son las verdaderas intenciones del extravagante señor Pride? ¿Qué prodigios se guardan en los lóbregos sótanos de la universidad?
Y lo que es más, ¿podrá Sherlock Holmes resolver todos estos misterios, trabajar con unos nuevos y monstruosos aliados, y evitar que el mundo acabe invadido por una plaga de muertos vivientes?.

Opinión

 Ya el hecho de que el libro tratara de Sherlock Holmes (un personaje que me encanta) era motivo suficiente para atreverme a leerlo, pero si a eso, le añadimos que el libro gira en torno a un elemento sobrenatural como los Zombis, me resultaba totalmente perfecto. Quería desde algún tiempo leer algo sobre estos seres, y qué mejor que empezar por un libro qué sabía que me iba a gustar. 

 Empezaré hablando sobre la narración, ya que es un elemento que me llamó poderosamente la atención: Aunque está narrada en primera persona (por Otis Mercer) y lo hace de manera que involucra al lector en su lectura, tiene una forma de hablar que concuerda totalmente con la época en la que trascurre la acción y que predomina sobre todo en los diálogos. La definiría como anticuada para que me entendáis.

Sobre los personajes, los hay de los más variopintos, ya que el autor no se ha limitado a inventarse ninguno, sino que los ha sacado de otras obras, cosa que yo no supe hasta el final del libro, donde nos trae un índice con los nombres que han aparecido a lo largo de la novela y nos explica quiénes son y de dónde han salido. Yo no conocía a ninguno, pero me imagino que para aquel que los conoce, la lectura se le hará muy original.

Todos tienen una personalidad muy marcada y eso hace que se disfrute al máximo del libro. Me he reído con el pesimismo de Otis Mercer, con el irónico Sherlock Holmes, con el impaciente Baker, y con todos esos personajes que han contribuido a crear ese ambiente de cercanía.

Respecto a la trama es bastante sencilla, pero plagiada de acción. 

Tal como nos dice la sinopsis Sherlock Holmes está apunto de jubilarse, pero una serie de acontecimientos hará que retrase su decición para prestar toda su atención a lo que será su último caso. Aunque os pueda parecer fantasioso, todo está enfocado desde el punto de vista de la ciencia. Incluso la existencia de estos zombis tiene un porqué, un motivo, y como no, una fórmula para llevarlo acabo.

Una novela de héroes y villanos, que recomendaría a todas aquellas personas que le gusten especialmente las novelas de detectives, y que encuentren agradable encontrarse algún que otro elemento sobrenatural.

Así que mi puntuación es: